|    Artículo:   El uso indiscriminado de la tecnología   |

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17-01-2018
La tecnología, como muchas cosas en esta vida, no son malas de por sí, son los excesos los que hacen que se comiencen a reportar daños a las personas y a los ambientes por su uso indiscriminado.

Existe un excesivo bombardeo de las empresas que producen la tecnología por hacerlas ver como algo muy bueno para todos; sin distinciones de edades, sexo, condiciones especiales o cualquier otra razón.

Pero a lo largo de los años y las generaciones, los estudios serios en salud, psicología, neurociencia, etc., han permitido identificar con exactitud los principales riesgos que el uso indiscriminado de la tecnología para determinadas personas ahí sí, relacionados con edades, tiempo de uso de la tecnología al día, dispositivos, juegos, computadoras u otros objetos relacionados con la tecnología.

El uso de tabletas y celulares en niños menores de dos años, trae entre otras consecuencias una disminución en el aprendizaje de la capacidad de autorregularse, ya que el rápido satisfactor que brinda el uso de estos dispositivos, hace que no haya un tiempo de hacer rabietas y enseñarle a aprender a controlarlas.

El desarrollo psicomotriz de los niños está íntimamente relacionado con el desarrollo cognitivo, entonces el hecho de cambiar los juegos psicomotrices por la tableta hace que el desarrollo cognitivo sea más lento, esto influye más en los idiomas y las matemáticas, así como en la escritura. Mismo asunto que repercute en la obesidad infantil por la falta de movimiento.

Algunos estudios han demostrado que además de que influye el uso de dispositivos en los patrones del sueño en niños, también lo hace en adultos y los videojuegos también provocan esto.

Uno de cada once niños, se anunció en el 2008, son adictos a las tecnologías digitales. Cuando es sujeto de una adicción es más fácil pasar a otras adicciones.

Para los padres el uso de tabletas y celulares para calmar a los hijos en un berrinche o rabieta pareciera muy fácil, sin darse cuenta que este hábito irá cambiando las recompensas necesarias para el niño para dejar de llorar o enojarse por cosas cada vez más complicadas o caras. Cuando alguno de ellos quiere justificar el pasarle estos dispositivos al niño, lo hacen con el argumento de que es muy inteligente y el uso todavía mejora sus capacidades (mentira) o lo hacen diciendo que debe de aprender el uso de la tecnología para cuando vaya creciendo ya tenga este conocimiento (otra mentira), ya que dicen los expertos que la tecnología no requiere mucha ciencia para aprenderse, aunado al hecho de que con el paso de los años se va simplificando y lo que ellos aprendan en este momento ya no servirá en algunos años.

Es importante que desde la aparición de la tecnología hace ya algunos años, las mismas compañías que la fabrican han dejado correr mitos (verdades no comprobadas) que muchos de nosotros nos hemos creído y que es hasta hace pocos años que muchas de estas verdades han adquirido la categoría de mitos porque al hacer estudios científicos no fueron comprobadas y, todo lo contrario, en vez de favorecer al ser humano le han hecho daño.

Es de llamar la atención que los hijos de los genios de Silicon Valley, son enviados por sus padres (incluyendo de CEOS de las compañías) a escuelas donde el uso de la tecnología es restringido hasta edades tardías.

En 2015 salió un informe de la OCDE relacionado con la educación y el uso de medios tecnológicos que vale la pena leer y analizar.

Por: MA. Yolanda García Ferrer